John Dall y Farley Granger asesinan a David,un compañero de clase, con el fin de realizar un crimen perfecto perpetrado por dos seres que se creen con derecho por su alta valía intelectual, frente a la imprescindibilidad de la víctima. Ante la muerte, harán una celebración donde asisten algunos de los familiares y viejos conocidos de David. El suspense se centra en si estos allegados al difunto, y nunca mejor dicho, se darán cuenta de que la fiesta es por el asesinato de David, que se encuentra corpore insepulto en el arcón sobre el que comen.
Hay dos cosas por las que merece la pena ver esta película, además de por la capacidad de Hitchcock para mantener el suspense. Una, es la brillante interpretación de John Dall que se sitúa genialmente en lo macabro recordando un poco a Jack Nicholson 32 años más tarde en El resplandor de Stanley Kubrick. Pero hay que valorar todas las intervenciones, ya que los actores estaban sometidos a una duración de planos muy extensa.
La segunda razón, es el magnifico trabajo ejecutado por los cámaras ya que esta cinta fue grabada en un solo plano sin cortes(más que los estrictamente necesarios determinados por el cambio de rollo, que eran rollos de 10 minutos, solventado con un cierre de plano en la espalda de los personajes) y sin montaje posterior, como una obra de teatro. Esto multiplica las dificultades en todos los aspectos: actores, director, cámaras, espacio... Fue la primera grabada por Hitchcock en technicolor, lo que implicaba menor espacio puesto que eran cámaras muy grandes.
Dato curioso, es que la homosexualidad de los protagonistas quede implicita por razones de censura y que Cary Grant, actor en el que había pensado Hitch para hacer de profesor, no quisiera intervenir para que no se relacionara con "eso".
Original el trailler, en el que vemos vivo a la victima y conocemos algo de él.
Además, cabe decir que como de costumbre, el director aparece en la cinta paseando por la calle en la que viven. Mientras que en principio había pensado aparecer su perfil en neón, avistado a través del ventanal, cosa que le pareció muy obvia finalmete.
Curioso es ver también en la pelicula, como a través del ventanal se van dando los cambios de luz corespondientes al paso del tiempo que percibimos indirectamente.
El único pero, es que le daría un plus de misterio que no se hubiera visto en la primera escena del filme como asesinan a la víctima, de tal manera que ni el propio receptor supiera si en el arcón había realmente un cuerpo. Esto selo recriminó el guionista a Hitch pero a él le gustaba más de la otra manera.
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